Entre las piezas que interpretaremos en nuestro próximo concierto de orquesta COAM, podréis escuchar el Intermezzo de Cavalleria Rusticana, con la que Mascagni nos describe la pasión y el dolor de un amor no correspondido.
Para un concurso de ópera
En 1888, Pietro Mascagni decidió presentarse a un concurso de ópera para jóvenes compositores; quedaban pocos meses de plazo pero logró entregarla a tiempo. Fue un gran éxito que su autor no consiguió repetir.
Un domingo de Pascua en un pueblo siciliano
Basado en un relato verista de Giovanni Verga, el libreto nos lleva a un domingo de Pascua del siglo XIX en un pueblo siciliano y nos habla de infidelidades, celos, dolor y venganza.
Cuando los hilos de la tragedia ya se han tendido, en un escenario vacío donde pronto estallarán las pasiones, los violines introducen esta melodía dulcísima del Intermezzo que evoca un paisaje de paz y tranquilidad en el campo siciliano. A medida que la música avanza, las cuerdas se vuelven más intensas y los vientos comienzan a agregar dramatismo a la pieza para llevar la melodía al punto culminante en el que se refleja el conflicto emocional de los personajes principales de la ópera. Finalmente, la música se desvanece en un final tranquilo y pacífico, con una última nota suave de las cuerdas que parece flotar en el aire.
¿De qué me suena esta música?
La melodía intensa y conmovedora del Intermezzo de Mascagni la hemos escuchado de fondo en multitud de anuncios publicitarios y está presente en varias escenas de obras maestras del cine como El padrino III de Coppola o Toro Salvaje de Martin Scorsese.
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